Antonio F. Marín: Rayos

24 de noviembre de 2012

Rayos

Los  rayos atacan más a los hombres que a las mujeres, mucho más,  porque el 82% de las personas que mueren por un rayo en EE UU son varones. Los expertos creen que se debe a que ellos son menos prudentes que las mujeres.

 Y puede ser, pero es que es muy fácil ser prudente cuando dispones de un amplio bolso en el que  meter  el  pararrayos. A los hombres no nos cabe en el bolsillo del pantalón.  También puede ser que  los rayos nos tengan  manía, que  ellos son muy suyos.

Como los americanos que se escandalizan por todo. Todavía resuena el guiriray por la aventura sexual de un general jefe de la CIA que     yació (y folló),  con una chica que no era su esposa. Y sin que sus espías le informaran de que se equivocaba, que no era la reglamentaria. Ten espías para esto.

Es curioso, pero a uno nunca lo pillan en un escándalo sexual. Ya quisiera yo. Me esfuerzo pero no me como ni una rosca ni un colín. Hasta para esto de los escándalos hay clases:  ricos que pueden escandalizar y feos que no encontramos rendija.


Pero en EE.UU. se escandaliza mucho, sexualmente, ya que en España los escándalos son de  otro jaez y con otros licenciosos y sus licencias,  pues la derecha de Rajoy le ha   subido las tasas judiciales a los más necesitados, sólo a ellos, porque a los pudientes les da igual el precio. Ni miran la etiqueta. Quieren convertir el derecho a la Justicia en un lujo, disuasorio, como lo es ir a una boutique de postín. Que un tetrapléjico tenga que apoquinar 19.550 euros para reclamar la indemnización a la aseguradora,  sí que es un buen escándalo, inmoral, protagonizado por unos lumbreras que necesitan  un suicido en una vivienda  para que sus meninges furulen, «cogito ergo sum» (Descartes).

Ahora han encontrado un paliativo coyuntural a los desahucios que es insuficiente y  llega tarde porque desde 2008 ya hay miles de vecinos en la calle,  sin que jueces, políticos, sindicalistas, alcaldes o policías se hayan escandalizado antes, porque  incluso algunos de ellos desahuciaban tan ricamente desde los consejos de las ‘antiguas cajas’, que son las que han provocado la mayor parte de los desahucios «al conceder creditos insolventes a trabajadores con 3 meses de contrato y por el 120% del valor de la vivienda» (El País).

La mejor noticia es ese «fondo social de viviendas» destinado al alquiler, procedentes de los bancos y «a precios bajos» (que ya propuso IU), y que demuestra que la política puede servir para algo más que  exigir que te repongan el iPad que 50 señorías han perdido (en casa de sus hijos).

Porque el Consejo de Estado ha dictaminado que el euro por receta   de Cataluña y Madrid, es inconstitucional pues genera desigualdades en el acceso a las medicinas. Aunque  esa desigualdad sanitaria ya existe porque en algunas comunidades ofrecen  los test genéticos para prevenir el cáncer que  otras no pueden. Además de muchos otros desiguales servicios. No sólo son los rayos los hijoputas que discriminan.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza.

Mobusi